TITULO: Lluvia fina
AUTOR: Luis Landero (Badajoz,
1948)
EDICION: TUSQUETS
Editores
He llegado ahora mismo al punto final y estoy
conmocionada. He leído los últimos tres capítulos sin levantar
los ojos del texto, sin poder moverme
del sofá. Estoy sola en casa y me siento profundamente zarandeada. Quisiera
poder transmitir todo esto que se está moviendo en mí y no creo que sepa hacerlo.
Es
el primer libro que leo de Luis Landero y ya se ha situado en el estante de mis autores admirados, aunque creo que “admirar” se me queda corto.
En
las primeras páginas la lectura se me hizo algo complicada porque hay una
sucesión de diálogos que relatan a su vez conversaciones entre otros personajes, así que tuve que volver a empezar para
poder situarme. Desde luego no es un
libro para leer mientras tienes música de fondo o cualquier otra distracción, a
mí me ha requerido silencio exterior e interior.
La
historia de una familia contada a través de las dos hermanas, el hermano y la
madre que se contradicen, enmiendan, inventan (o no) teniendo como nexo de unión a Alicia, la
esposa del hermano. Su pasado comiéndoles el presente, historias
de familia, unas veces oscuras, otras que parecen inocuas, todas ellas cargadas
de culpa, rencor, doblez. Y todas se depositan en Alicia, a quien acuden buscando justificación o respuesta a silencios y mentiras, si es
que son mentiras.
Pero
es Alicia y “su historia” la que poco a
poco se va colando y se va situando en el centro de todo. Casi no te das cuenta
y es ella quien te está mostrando, sin realmente hacerlo, su dolor y
su miedo, su relato.
No
sobra una sola coma ni un solo adjetivo. Es una explosión de palabras que
siendo explosión rezuma contención y economía. O más que explosión quizás sea implosión, totalmente controlada;
evidentemente, no eres tu quien controla. Tú no controlas nada, como tiene que
ser.
Toda
la novela es muy potente, pero los tres
últimos capítulos son un
alud de piedras que con ruido sordo pero cada vez más fuerte se me ha venido encima. Y podríamos decir que
el final me ha arrollado.
En
fin, totalmente recomendable. Es más, no te pierdas el placer de leer esta
maravilla de historia y de dominio de las palabras. Y de los silencios, los de
Alicia.
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